VOLANTE DE LA AGRUPACIÓN CARLOS FUENTEALBA

Salgamos a luchar por nuestro salario

Por un 1º de mayo de lucha contra el ajuste y la represión del gobierno K

En estas últimas semanas se está dando un hecho distintivo: las luchas de los trabajadores comienzan a copar la escena. En efecto, los trabajadores estatales, judiciales, del subte, los docentes universitarios, los no docentes universitarios en Mar del Plata, los trabajadores de la Línea 60 y los docentes en Capital Federal y muchos otros están en plenos planes de luchas. La reivindicación es la misma en todos los casos: aumento salarial frente a una creciente inflación que se está devorando los salarios. Y esto sucede porque todos sienten en los bolsillos lo mismo, que el salario se va depreciando mes a mes y que lo que se cobra no le alcanza a nadie.

Pero esto no es una mera “sensación”, es parte del ajuste que está aplicando el gobierno nacional de Cristina K y sus aliados como el gobernador Scioli. Esta es la explicación de lo que está sucediendo actualmente, estamos en medio de un ajuste a los trabajadores vía la depreciación del salario mediante la inflación. Mientras todo aumenta cotidianamente y el secretario Moreno autoriza aumentos a diario (ahora anunciaron un aumento del pan de un 15%), el gobierno nacional y los gobiernos provinciales imponen techos salariales del 20%. Eso es lo que pasó en la lucha docente, donde la burocracia sindical Celeste de la CTERA- Suteba de la mano de sus aliados cegetistas de la FEB acordaron con el gobierno un aumento por ese porcentaje. Y ese acuerdo salarial era el que le importaba al gobierno nacional para que funcionara como techo salarial y como caso testigo, contando para ello con la complicidad de las burocracias sindicales que acordaron por migajas mientras la presidenta atacaba a los docentes (“trabajan 4 horas y tienen 3 meses de vacaciones”), en medio de un proceso de lucha que incluyó desbordes por la base en varias provincias (Mendoza, Capital Federal, Córdoba, etc).

Este esquema de ajuste que no deja de ser ortodoxo se lleva adelante al haber tenido que retroceder el gobierno nacional de su intención inicial de aplicar este mismo ajuste por el lado del alza de los servicios públicos mediante la quita de subsidios. Luego del 54% obtenido en octubre, el gobierno nacional utilizó esa legitimación no para “profundizar el modelo” como muchos trabajadores creyeron que iba a pasar, sino para salir a ajustar. Pero tuvo que retroceder pues en el medio se encontró con la resistencia de los trabajadores mediante duras luchas (como la de los docentes) y se produjo la masacre en Plaza Once que le costó la vida a 51 trabajadores desnudando la complicidad del gobierno K con las patronales (como Cirigliano en TBA) a las que subsidió durante largos años con montos multimillonarios sin control alguno, siendo cómplice de la brutal desinversión que pone en riesgo la seguridad de todos los trabajadores.

Entonces los trabajadores nos encontramos en una situación donde se demuestra que nuestro país no está “blindado”  (como decía el gobierno nacional) frente a la crisis económica mundial que sigue profundizándose y que la “caja”, es decir los recursos, del gobierno se achica día a día. Y frente a eso el gobierno está pretendiendo que los platos rotos los paguemos los trabajadores. Esta es la famosa “sintonía fina” de la que habla la presidenta.

Por ello no es casualidad que de la mano de la “sintonía fina” el gobierno haya hecho aprobar la represiva Ley Antiterrorista que permite duplicar las penas a todos los que se manifiesten, considerando terroristas a todos aquellos que salgan a luchar (por ejemplo está estipulado que son pasibles de cárcel aquellos que “obliguen a una autoridad nacional o provincial a hacer algo en contra de su voluntad”, por ejemplo los que salgan a las calles a luchar por salario obligando a los gobiernos a dar aumentos). Por eso no es casualidad que se haya puesto en pie un proyecto de espionaje sobre todos aquellos que salen a luchar o que se haya reprimido la lucha de los pueblos en defensa de su medio ambiente contra la megaminería a cielo abierto contaminante. Todo esto es el marco que acompaña el ajuste del gobierno K. Hablando en criollo, ajuste para los trabajadores, palos para los que luchen contra los techos salariales y beneficios para las patronales amigas (como el caso de Cirigliano, Blaquier y muchas otras).

Ante esta situación, quienes formamos parte de la Agrupación de Trabajadores Carlos Fuentealba y el Nuevo MAS sostenemos que la única salida es salir a luchar por nuestro salario enfrentando las políticas de los gobiernos de Cristina- Scioli. No podemos esperar más a que salgan buenos acuerdos entre el gobierno nacional o provincial y las burocracias sindicales, eso ya quedó demostrado con la paritaria docente. Estas burocracias son mas funcionales a sectores patronales que a los mismos trabajadores, ya sea apoyando al gobierno K como la CTA Yasky o a la oposición patronal como la CTA Micheli- ATE. Por eso no luchan verdaderamente y por eso no llaman a movilizarse o convocan a asambleas de base que discutan y voten verdaderos planes de lucha. Muy por el contrario, constantemente juegan a la desmovilización y a la desorganización, no unificando nunca luchas entre diferentes sectores. Por eso los trabajadores debemos desbordar a estas direcciones sindicales que no sirven para triunfar en esta lucha. Lo vimos en cada proceso de lucha donde estas direcciones nunca se dedican a organizar a los trabajadores, jamás convocan masivamente a las asambleas y mucho menos a la movilización, haciendo acto de presencia únicamente cuando esta salen por impulso de los trabajadores, dejando inclusive desguarnecidos a los trabajadores mas nuevos frente a las presiones de las patronales. Pero el camino se mostró en lo que se hizo hasta el momento, en el desborde a estos sectores como pasó en Córdoba, Mendoza o Capital, donde miles de docentes se movilizaron independientemente de la burocracia sindical o en el gremio de los judiciales donde los trabajadores tomaron la Corte Suprema de la provincia de Buenos Aires enfrentando la política conciliadora de la burocracia de la AJB. Ese es el camino a profundizar, salir a luchar por el salario. No podemos confiar en que ni la CGT de Moyano, ni los gordos K, ni las CTAs oficialistas y opositoras vayan a pelear por nuestras reivindicaciones.

Los trabajadores debemos luchar por un aumento salarial superior al 35%, por eliminar los topes a las asignaciones familiares, por eliminar el profundamente regresivo impuesto a las ganancias que insólitamente pagamos cada vez mayor cantidad de trabajadores, por el derecho al 82% mínimo, vital y móvil que nos asegure una buena jubilación. Estas son las medidas mínimas por las que debemos salir a luchar, sabiendo que en esta lucha enfrentamos las políticas del gobierno K que cuentan con la complicidad de las burocracias sindicales. Por eso debemos aprovechar este 1º de mayo que se viene como un día que sirva para comenzar a unificar luchas, para organizar un acto unitario en defensa de los trabajadores. A esto convocamos desde la Agrupación Carlos Fuentealba y el Nuevo MAS

► Por un 1º de mayo al servicio de la lucha de los trabajadores

► Por la eliminación de los topes a las asignaciones familiares

► Por la eliminación del impuesto a la ganancia sobre los sueldos de los trabajadores

► Por el 82% móvil

► No al techo salarial y al ajuste del gobierno K